Seguimos de cerca los movimientos respecto al uso medicinal del cannabis en Paraguay. El que podría ser el mayor productor ilegal de cannabis de Suramérica parece que verá en breve aprobado el proyecto de ley que establece el marco de regulación para la investigación y uso medicinal del cannabis y sus derivados, al haber sido sancionado por el Senado.
Ya vimos como el 15 de Noviembre, la Cámara Alta de los diputados aprobaba el texto para el uso medicinal del cannabis en Paraguay y lo pasaba al Senado para su aprobación. Como continuación, la pasada semana se completó el visto bueno del Poder Legislativo con lo cual el proyecto de Ley pasa ahora al ejecutivo para su promulgación o veto.
Con ello quedará creado el Programa Nacional para el Estudio y la Investigación Médica y Científica de la planta de Cannabis y sus Derivados (Proincumec) derogando parcialmente la actual ley de sustancias estupefacientes al excluir la cannabis, su resina, extractos y tinturas de la lista de drogas peligrosas.
Puntos básicos de la nueva ley de uso medicinal del cannabis en Paraguay
– Promover la investigación médica y científica del uso medicinal, terapéutico y/o paliativo de la planta cannabis y sus derivados para el tratamiento de enfermedades y afecciones en humanos. Con este objeto se reglamentará también su producción controlada.
– Garantizar el acceso gratuito al aceite de cáñamo y demás derivados de la planta de cannabis a toda persona que se incorpore al programa.
– Investigar las propiedades de la planta del cannabis y sus derivados en la terapéutica humana, los efectos secundarios del uso medicinal del cannabis y propiciar la participación voluntaria de pacientes en estudios científicos e investigación sobre el uso medicinal del cannabis en ciertas patologías.
– Promocionar la industrialización controlada del aceite de cáñamo y demás derivados de la planta de cannabis para uso medicinal y tratamiento de enfermedades en humanos
– Otorgar a la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) el rol de fiscalizador de cualquier proceso de cultivo o producción de cannabis con los fines establecidos por la ley, así como para la importación de plantas o semillas de cannabis.
– Otorgar al Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) el rol para autorizar este comercio de productos del cannabis así como para delimitar los tipos de semillas que podrán utilizarse para los fines médicos en los cultivos.
– Crear un Registro Nacional Obligatorio de Usuarios de Productos Derivados del Cannabis a través del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
Elevado coste de cannabis medicinal importado
A principios de junio, la venta de aceite de cannabis para uso terapéutico se hizo realidad en Paraguay tras una ardua lucha encabezada por Cannabis Medicinal Paraguay (Camedpar) y Mama Cultiva Paraguay quienes junto a médicos, abogados y representantes de la sociedad civil trabajaron con el Ministerio de Salud Pública. Sin embargo al proceder del exterior y venderse en lugares muy limitados y bajo receta estrictamente controlada por la institución de salud, acceder a ello sigue siendo un lujo para una gran mayoría de pacientes. Y es que una botella de un cuarto de litro cuesta unos 316 dólares.
Según los expertos, esperan que una vez se produzca en los laboratorios del país, uno de los cuales previsiblemente serán los Laboratorios Lasca, el coste se reduzca a 35 dólares en farmacias privadas, expendiéndose de forma gratuita a personas de escasos recursos en los centros de salud estatales.
Según la agencia Reuters, Roberto Cabañas, vicepresidente de Camedpar expresó su gran satisfacción porque también se permitirá la “importación de semillas para la elaboración del aceite aquí“. Cabañas, como padre de una pequeña con síndrome de Dravet que convulsiona desde los ocho meses y gasta más de 300 dólares mensuales en aceite importado, aplaude la medida ya que “la gente que esté en el programa podrá también acceder gratuitamente al producto“.
Entre los legisladores de la ley de uso medicinal del cannabis en Paraguay se encuentran el proyectista de esta ley, el liberal Fernando Silva Facetti quien manifestó a EFE que hubo un olvido en el texto al excluir la despenalización del cannabis. También participaron la senadora Desirée Masi o Esperanza Martínez, del Frente Guasu. Esta última lamentó que se haya excluido el proyecto “mamá cultiva”, para la producción familiar, si bien advirtió que se encargará de promover legislación sobre el tema. Por su parte la cartista Mirta Gusinky sugirió cuidar las dosis para evitar potenciales adicciones.
