Dabbing: la nueva técnica de consumo de cannabis

Los dabs son concentradas dosis de cannabis que se obtienen extrayendo el THC

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cannabis derretido en forma de dabbing

A poca gente le es familiar esta curiosa forma de consumir cannabis. Después de todo, el “dabbing” es un método relativamente nuevo, empezado a ser utilizado hace tan solo una década. Sin embargo, su gran potencial ha llamado la atención de muchos usuarios de cannabis, y es un método de consumo que se ha puesto de moda. ¿Pero qué es exactamente el dabbing y qué implicaciones tiene?

dabbing-concentrados

Dabbing, Dabs y cómo se fabrican

Los dabs son concentradas dosis de cannabis que se obtienen extrayendo el THC y otros compuestos, utilizando un disolvente como el butano o el dióxido de carbono. Este proceso resulta en un pegajoso aceite amarillento, también conocido como “cera”, forma típica en la que los dabs son presentados. Estas concentraciones de cannabis son situadas en un aparato especial de metal o cristal, que posteriormente calentándolo con un soplete liberará en forma de vapor los cannabinoides.

Aunque es posible extraer componentes no psicoactivos como el CBD, el THC es aquel que está detrás de lo potentes resultados del dabbing, haciéndole el método más eficaz para sentir los efectos propios de este compuesto. Las concentraciones de THC en un solo dab pueden oscilar entre el 70-90%.

Para ojos inexpertos es fácil confundir el dabbing con la vaporización, a pesar de que ambos sean métodos bien distintos. Una diferencia entre ambos es la forma de calentar el cannabis, pues el dabbing utiliza calor conductivo (siendo transmitido directamente por el contacto con la plataforma) y la vaporización emplea cada vez más el calor de convección (en este caso calentando la cámara de aire donde la planta está ubicada con un elemento calorífico). Por otro lado, el proceso de preparación y los aparatos también son distintos para ambos métodos.

 

Riesgos del Dabbing

El dabbing a pesar de su reciente popularidad es también un método arriesgado. En realidad, su peligrosidad se debe a su forma de extracción, la cual puede ser complicada si no se conoce bien. Existen muchos “gurús” del dabbing en foros de internet y en vídeos, que tratan de enseñar cómo preparar correctamente un dab. Seguir estos consejos en la mayoría de los casos, resultará en una concentración bastante mediocre y pobre. En el peor de ellos podría incluso causar un accidente y que una casa entera acabe explotando.

Otra consecuencia adversa de estas extracciones caseras es que el aceite utilizado puede contener contaminantes químicos que presenten un riesgo para la salud de los consumidores. El butano apenas presenta riesgos en sí mismo, pero los contaminantes dejados detrás en el proceso pueden ser peligrosos, con lo que es importante hacer una extracción correcta para evitar la mayor cantidad posible de ellos.

Una de las mayores preocupaciones sobre los dabs es su gran concentración de cannabinoides, con lo que puede parecer un método arriesgado. A pesar de que es cierto que un consumo irresponsable puede resultar peligroso, ser conscientes de la cantidad que estamos tomando nos ahorrará los problemas que una sobredosis pueda conllevar.

 

Beneficios medicinales del Dabbing

La mayor ventaja de las altas concentraciones de los dabs en THC es que ofrecen una potente dosis de medicina para aquellos que verdaderamente lo necesitan.

Muchos pacientes que han tenido que lidiar con un dolor crónico o náusea extrema han reportado que el dabbing es uno de los mejores métodos para conseguir un alivio inmediato. Esta peculiaridad lo hace perfecto para aquellos que necesitan un poderoso medicamento rápidamente, que además ofrece todos los beneficios que el cannabis medicinal conlleva.

 

¿Es entonces recomendable el Dabbing?

Como hemos visto el dabbing es un método de consumo de cannabis con mucha fuerza, que como todos puede resultar beneficioso o dañino según se utilice.

Lo más importante a la hora de fabricar un dab es ser un experto en el proceso de extracción, y asegurar todo el equipo antes de iniciar una de ellas. Si somos nuevos en el mundo del cannabis o simplemente no nos sentimos preparados para llevar este proceso a cabo, es recomendable utilizar otros métodos más seguros pero que conllevan los mismos beneficios.

Después de todo, el dabbing es aún una técnica relativamente nueva, y es posible que se necesiten algunos años para poder completamente desarrollarla. Este método es eficaz para aquellas personas que necesiten una medicina rápida y potente para su condición, acompañadas siempre por un experto, pero para el resto de nosotros la utilización de tópicos o la vaporización pueden ser otros métodos efectivos de conseguir los beneficios del cannabis.

La información presentada en este artículo está dirigida a fines útiles e informativos. No debe usarse ni como recomendación ni tratamiento médico.

·Referencias:

Herb.co – How to dab