Un estudio muestra como el consumidor de cannabis es capaz de reconocer la cepa a través del aroma lo cual determina su percepción de la calidad de la cepa y en ultimo termino cuanto esta dispuesto a pagar por ello. Los investigadores se proponen crear una escala de olor del cannabis similar a la existente en vinos, aceites, o cafés.
El aroma del cannabis es de interés para los usuarios, los cultivadores, los mejoradores de plantas, la policía y, cada vez más, para las empresas comercializadoras con licencia estatal. Las numerosas variedades de cannabis producen esencias sorprendentemente diferentes, pero hasta la fecha ha habido pocos intentos de cuantificar estos perfiles olfativos directamente.
Usando técnicas de evaluación sensorial estándar con consumidores no entrenados, un estudio ha conseguido validar un léxico olfativo preliminar para la flor de cannabis seca, y caracterizar el perfil de aroma de once cepas vendidas en el mercado recreativo legal de Colorado.
El estudio demuestra que los consumidores perciben las diferencias entre las cepas, que las cepas forman grupos distintos basados en la similitud del olor, y que los perfiles del aroma de la cepa están relacionados con las percepciones que el consumidor tiene de su potencia, precio e interés por fumar. Teniendo en cuenta que en solamente en Hispaweed, tenemos mas de 500 cepas definidas y solo es una parte de ellas, hay un importante trabajo a realizar si se pretende definir las características olfativas de todas las cepas existentes.
Necesidad de definir el olor del cannabis
Hoy existen muchas variedades y cepas de cannabis sativa criadas en base a sus características deseables, como la potencia, la forma de crecimiento y el sabor. Así ha surgido una próspera industria minorista que entre otros productos vende flores de cannabis secas o “yemas” que, además de variar en contenido de THC, exhiben una amplia gama de aromas específicos.
El olor del cannabis es un tema importante en muchos frentes: la Cuarta Enmienda de EE.UU. acepta la regla del ” simple olfato ” para la búsqueda e incautación de cannabis en muchas jurisdicciones, quejas públicas de olores se hacen oír a medida que aumentan los comercios minoristas, vecinos que informan de olor a cannabis…..Con la expansión del uso recreativo legal, los productores y consumidores se están volviendo más conscientes de los matices del aroma de cannabis por razones estéticas y de experiencia, así como por las señales que este olor puede proporcionar acerca de la calidad del producto. Por ejemplo, el aroma y el sabor se encuentran entre los factores que se juzgan en las competiciones organizadas de cannabis. Dada la supuesta influencia del microclima y las condiciones del suelo sobre la calidad del cannabis, en California se están realizando esfuerzos para establecer denominaciones similares a las del vino; Se han propuesto once denominaciones de cannabis para el condado de Mendocino, y el condado de Humboldt sigue un plan similar.
Algunas categorías de productos como el vino, el café y la cerveza ya disponen de léxicos sensoriales validados, a menudo presentados visualmente en forma de “ruedas de sabor”. Estos proporcionan conjuntos estandarizados de términos que permiten descripciones concisas, confiables y de fácil comprensión de los principales atributos sensoriales de un producto. Resultan útiles tanto para expertos como para principiantes, y ayudan a los consumidores a apreciar las muchas versiones del producto final. Pero tal léxico aun no existe para el aroma de la flor seca de cannabis ni, según los responsables del estudio, se ha examinado este tema desde una perspectiva principalmente psicofísica. El análisis científico del olor se ha limitado casi exclusivamente a la identificación química de los compuestos volátiles que se encuentran en toda la planta, pero especialmente en la resina de la inflorescencia femenina. El análisis químico proporciona información útil, pero, por sí solo, ofrece poca información sobre cómo huele una muestra determinada. En algún momento, los juicios sensoriales se vuelven necesarios para vincular la composición química con el carácter olfativo.
Olor del cannabis definido con 48 descriptores
El estudio realiza una evaluación sensorial directa como un primer paso para una comprensión empírica del aroma de cannabis. El objetivo ultimo y fundamental es proporcionar a los consumidores y expertos un conjunto de términos descriptivos estandarizados y fáciles de entender. Para ello se plantearon los siguientes objetivos intermedios:
- 1- desarrollar un léxico olfativo inicial para la cepa de cannabis usando métodos de investigación sensorial estándar;
- 2- determinar si existen diferencias medibles en el perfil del aroma entre las cepas disponibles en el mercado minorista; y
- 3- determinar si los perfiles aromáticos específicos de la cepa se pueden vincular a las percepciones del consumidor sobre la calidad del producto.
El estudio termina planteando un conjunto de 48 descriptores los cuales parece suficientes para cubrir el espacio de olor relevante y permitir a los consumidores diferenciar las cepas por el olor. Sin embargo, los resultados también sugieren que un subconjunto más pequeño de términos de olor del cannabis puede ser adecuado para aplicaciones prácticas.
La mayoría de los descriptores utilizados en este estudio son auto-explicativos y fáciles de definir. Algunos, como el diesel, requieren una mayor definición y el desarrollo de estándares de olor. Una peculiaridad del cannabis es que algunos descriptores con connotaciones nominalmente negativas (skunk, picante, diesel) se asociaron con evaluaciones positivas de productos, mientras que otros (terroso, químico, alquitrán) se vincularon con evaluaciones negativas. Es bien conocido que las cepas de cannabis de olor desagradable son populares entre ciertos consumidores ( similar a la popularidad de otros productos malolientes como el queso, la soja fermentada, etc…).
Olor del cannabis y percepción de su calidad
Otro objetivo de este estudio fue determinar que efecto tiene el aroma específico de la cepa en las percepciones del consumidor sobre la calidad del producto. Para ello se pidió a los participantes que calificaran la potencia de la muestra, basándose solamente en el olor y qué tan interesados estaban en fumarla y cuánto esperarían pagar por ella. Las calificaciones de las tres variables difirieron significativamente entre las muestras, lo que indica que el olor de una cepa puede afectar la forma en que los consumidores califican estos aspectos de la calidad del producto.
Los investigadores hallaron que las cepas en el grupo cítrico / limón / dulce / pungente generaron estimaciones más altas de potencia, interés y precio que aquellas en el grupo de madera / tierra / hierbas. Aunque las percepciones del consumidor sobre la potencia del cannabis basadas en el olfato varían según la tensión, no muestran ninguna relación con el contenido de THC medido experimentalmente. Esto no es sorprendente dado que el THC es no volátil e inodoro. No obstante, el hecho de que notas de olor específicas estén asociadas con impresiones de la calidad del producto podría tener implicaciones importantes para la marca y la comercialización del cannabis recreativo.
Participantes usuarios de cannabis
Casi todos los participantes en el estudio tenían experiencia en la compra y el uso de cannabis y, por lo tanto, era más probable que estuvieran familiarizados con términos descriptivos exclusivos del producto (por ejemplo, diesel). Un resultado positivo de este sesgo de autoselección es que los resultados de precio y potencia son más convincentes que si se hubieran obtenido de individuos que no habían tenido contacto con el cannabis. El hecho de que los participantes familiarizados con la flor de cannabis y sus efectos psicoactivos creyeron que el aroma de la cepa se relaciona con la potencia, a pesar de su falta de correlación con el contenido de THC, habla del poder de las ideas preconcebidas del consumidor.
¿Cuál es la base física de las diferencias de olor observadas?
Se han identificado hasta 140 terpenos en el cannabis, de los cuales 17 se encuentran con frecuencia. Es ampliamente aceptado que los terpenos son la base del aroma del brote de cannabis, una suposición basada principalmente en su abundancia relativa en la planta. Pocos estudios han intentado relacionar el carácter del olor directamente con la composición química. La evaluación sensorial, combinada con el análisis químico, tiene el potencial de identificar los compuestos aromáticos clave en el cannabis y cómo varían entre las cepas. Comprender estas relaciones proporcionará aplicaciones prácticas en estándares para el control de calidad y la consistencia del producto, y facilitará el desarrollo de productos, la innovación y la educación del consumidor.
Autores del estudio: Avery N. Gilbert , Joseph A. DiVerdi
Publicado el 5 de febrero de 2018 en https://doi.org/10.1371/journal.pone.0192247 de acceso abierto bajo los términos de Creative Commons Attribution License,