El cannabis ha mostrado un gran éxito tratando los síntomas de la esclerosis múltiple. Pacientes alrededor de todo el mundo han encontrado un gran alivio para el dolor, la irritación intestinal, espasmos musculares e incluso la parálisis gracias al cannabis. Pero, ¿cómo puede una planta ser tan efectiva tratando una incurable enfermedad neurodegenerativa? Aquí está todo lo que tienes que saber para responder a esta pregunta.
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad del sistema nervioso central que a menudo degenera en discapacidad. Durante esta condición, el sistema inmune del cuerpo erróneamente ataca y destruye las células de mielina que protegen y aíslan las fibras nerviosas. Esto es un grave problema, ya que la mielina incrementa la velocidad con la que el impulso eléctrico se mueve entre el cerebro y el resto del cuerpo, y es esencial para que el sistema nervioso funcione adecuadamente. Una pérdida de mielina causa que las señales entre el cerebro y el cuerpo sean interrumpidas.
Los síntomas comunes asociados a la esclerosis múltiple incluyen fatiga, dificultad al andar, entumecimiento, espasmos musculares, debilidad, problemas de visión, mareos, problemas de intestino y vejiga, dolor, depresión, y cambios emocionales y cognitivos. En raras ocasiones, se pueden dar convulsiones.
La causa de la esclerosis múltiple es desconocida, pero la enfermedad afecta principalmente a mujeres comprendidas entre los 15 y 60 años de edad. Además, no existe cura para la EM. Los tratamientos, incluyendo la administración de corticoides para reducir la inflamación nerviosa y el intercambio plasmático, pueden ayudar a sobrellevar los síntomas y limitar potencialmente la progresión de la enfermedad, pero no curarla.
El abrumante éxito del cannabis en el tratamiento de la esclerosis múltiple es una de las razones por las que la planta ha ganado legitimidad alrededor del mundo. La EM es una de las condiciones primarias tratadas con varios de los medicamentos basados en cannabis en muchos países distintos, y aquí está el porqué de este éxito:
Los pacientes de esclerosis múltiple se enfrentan a un gran problema: la inflamación. Cuando las células inmunes se activan, liberan proteínas inflamatorias llamadas citoquinas, las cuales causan una grave inflamación en el cerebro. El resultado final es la destrucción de neuronas, y progresivamente el empeoramiento de los síntomas.
Los componentes activos del cannabis, denominados “cannabinoides”, son potentes antiinflamatorios. Compuestos como el THC y el no psicoactivo CBD reducen la hiperactividad del sistema inmune, enlenteciendo este violento ataque al sistema nervioso central. Una vez se ha calmado, el sistema inmune deja de atacarlo.
El cannabis también ha demostrado promover la neurogénesis en adultos, además de ser un potente antioxidante con propiedades neuroprotectoras. En conjunto, la marihuana con su poder antioxidante, antiinflamatorio, y sus cualidades neurogénicas, hacen de ella una poderosa medicina potenciadora del cerebro.
El cannabis es muy efectivo contra el dolor crónico, y los cannabinoides como el THC y el CBD actúan como analgésicos acoplándose a los receptores del dolor del cuerpo. El poder de la planta para reducir la inflamación también juega un papel aquí, ya que la inflamación y el dolor suelen ir de la mano.
A la vez que los tejidos en tu cuerpo empiezan hincharse y a irritarse, estos se deterioran, y es la ruptura de estos tejidos lo que provoca el dolor. Además, las células nerviosas pueden enviar señales del dolor hacia el resto del cuerpo mientras estos se están destruyendo.
El efecto calmante de la planta fue testado por un grupo de investigadores de la Universidad de California San Diego. En un ensayo clínico, los investigadores probaron los efectos de fumar marihuana en el dolor físico. Después de 5 minutos de fumar no hubo ninguna diferencia, pero tras 45 minutos los participantes que fumaron cantidades medias a elevadas de marihuana mostraron una reducción significativa en los niveles del dolor.
Investigadores de la Universidad de Tel Aviv en Israel consiguieron recuperar la capacidad de caminar de ratones paralizados gracias al CBD. Estos investigadores habían infectado previamente a estos ratones con una condición similar a la esclerosis múltiple, y al inyectarles CBD las piernas de estos animales volvieron a moverse, mostrando un descenso significativo del daño en las células nerviosas y menor inflamación. Exactamente el mismo efecto se observó posteriormente con la espasticidad muscular.
Los problemas gastrointestinales son comunes en pacientes con esclerosis múltiple, pero la marihuana puede ayudar a solucionarlos. Los cannabinoides pueden hacer contacto con las células inmunes del intestino, responsables de su inflamación, y así reducir su actividad.
El THC también es conocido por ser un estimulante del apetito, y el cannabinoide puede provocar la liberación de hormonas del hambre potenciando el metabolismo. Así, no solo los cannabinoides reducen la inflamación gastrointestinal, sino que también consiguen facilitar el flujo de alimentos a través de él mejorando la experiencia de comer.
Cuando tu cuerpo está fuera de control, dormir puede resultar una ardua tarea. Sin embargo, un estudio realizado en 2013 con hombres fumadores de cannabis encontró que podían dormir más fácilmente. Consumir THC antes de dormir hace que emplees más tiempo en la fase del sueño profundo, en la cual el cuerpo se repara a sí mismo. Esto implica la reconstrucción de huesos y músculos, además de que el sistema inmune también se repara durante esta fase del sueño.
El cannabis tiene la capacidad de mejorar el estado de ánimo de sus consumidores, y no es sorprendente de que pueda ayudar a superar síntomas relacionados con la depresión. Investigadores de la Universidad de Buffalo encontraron que las ratas bajo estrés crónico producían menos endocannabinoides, compuestos como el THC y el CBD que nuestro cuerpo produce de forma natural. Reemplazando la acción de esta deficiencia con cannabinoides, es posible reducir el efecto de la depresión.
Si tienes esclerosis múltiple, no es poco común que la enfermedad provoque problemas de visión. Algunos pacientes incluso sufren momentos temporales de ceguera, o son incapaces de controlar el movimiento de sus ojos. De nuevo el culpable es la inflamación, pero el cannabis ha probado ser efectivo en la reducción de esta también en los nervios ópticos.
La información presentada en este artículo está dirigida a fines útiles e informativos. No debe usarse ni como recomendación ni tratamiento médico.
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