Vapear cannabis esta en auge, incluso las universidades están estudiando este fenómeno. Es el caso de la Universidad Estatal de Portland en Oregon que ha planteado la hipótesis de que vapear cannabis podría ayudar a en la lucha contra la adicción al tabaco y para ello han realizado investigaciones para evaluar los beneficios de la vaporización.
Toda la investigación disponible se ha centrado en las consecuencias directas de la salud del vapeo y no en sus efectos en una visión más holística. Un grupo de científicos que investigan la adicción al tabaco ha detectado una tendencia que aparece en Estados Unidos y Europa y en la que creen que merece la pena investigar más. El autor en una carta al editor de la revista Society for the Study of Addiction (Sociedad para el Estudio de la Adicción) propone que vapear cannabis, ya sea en forma de planta entera o de concentrado, puede reducir el consumo de tabaco y la adicción.
El estudio citado en la carta al editor tenía como objetivo comparar las diferencias en las rutas de administración (ROA) del cannabis en diferentes regiones del mundo. Así concluye que en Europa, la forma más común de consumo de cannabis es en forma de cigarrillo o spliff, en el cual se pone solo cannabis o se combina parte de tabaco y parte de cannabis. Esta forma de fumar cannabis ayuda a fortalecer una relación psicológica entre el cannabis y el tabaco, el típico condicionamiento pavloviano.
Vapear cannabis si podría ayudar contra la adicción al tabaco
Según el estudio, muchos europeos son introducidos al tabaco fumando cannabis, un efecto denominado “Puerta de enlace inversa”. También el autor puntualiza que fumar cigarrillos es, de hecho, más común en Europa que en EE. UU. y Canadá. Además, los investigadores observaron que aquellos que usan vapeos de cannabis no tienden a mezclarlo con concentrados de tabaco, solo dos de 96 personas agregaban tabaco al vaporizador y encontraron una menor incidencia de consumo de tabaco en las áreas de aumento del vapeo de cannabis.
Los autores de la carta especulan que la normalización del vapeo de cannabis puede conducir a una generación de consumidores de cannabis que no están expuestos al tabaco ni a la nicotina. Por supuesto, las cosas nunca son tan simples como pueden parecer. Debido a que vaping (BHO) es una tecnología relativamente nueva, se necesita hacer más investigación para asegurar que no estamos reemplazando un hábito no saludable con otro. Al final del día, solo podemos desear lo mejor, y con suerte, veremos que esta investigación se financiará en los próximos años.
Más estudios sobre las asociaciones de vapear cannabis son necesarios
Los datos de 30.000 usuarios de cannabis sacados de la encuesta anual GDS de 2014 mostraron que sólo el 8% utiliza un vaporizador, pero este método de consumir cannabis ha sido reconocido como la estrategia más importante la reducción del daño y tienen un impacto positivo en el placer de la vaporización del cannabis.
Además, los datos de GDS sugirieron que los países con los niveles más bajos de consumo de tabaco, como Estados Unidos y Canadá, también mostraron el mayor uso del vaporizador. Además, estos datos sugieren que la motivación para usar el vaporizador fue el deseo de reducir el consumo de tabaco.
Si la vaporización de cannabis puede reducir la frecuencia del tabaco agregado al cannabis, se puede reducir el consumo de tabaco entre los consumidores de cannabis. La vaporización es cada vez más común, y los autores del estudio dicen que la próxima generación de consumidores de cannabis no agregaran tabaco.
Vale la pena señalar, sin embargo, que la correlación no es una relación causal. Los autores del estudio tienen una hipótesis sobre por qué existe esta correlación pero son conscientes de que se necesita más investigación.
